viernes, 15 de octubre de 2021

 

La sede central de UPCN reconocida como “edificio emblemático Art Nouveau”



·         Palacete de 1906 del Arq.  italiano Gerónimo Agostini

·         Único por la rica influencia de estilos: Art Nouveau, Floreale, Secesión

·         Recuperado por la UPCN por iniciativa de su Secretario General Andrés Rodríguez

·         En esa ocasión presentamos del circuito Art Nouveau del Barrio de Monserrat

·         Entregamos un “Reconocimiento” al Secretario General, Andrés Rodríguez y los restauradores

·         Es el 15º Edificio Emblemático de la Ruta Argentina del Art Nouveau nombrado por AANBA

·         Buenos Aires es la Capital Americana del Art Nouveau por la cantidad y calidad de las edificaciones en este estilo

Entrega del Diploma que declara al edificio emblemático del Art Nouveau al Sr. Andrés Rodríguez, Secretario General de UPCN

Entrega de diploma de reconocimiento a los restauradores

CV


        

El 29 de septiembre ppdo. se llevó a cabo el Nombramiento de la sede central UPCN,  Moreno 1332, CABA, como Edificio Emblemático Art Nouveau 2021 AANBA de la Ruta Argentina del Art Nouveau, en un acto que tuvo lugar en el mismo edificio.

Escalera principal

Primer piso, balcón hacia planta baja

Sector de exposición Primer Piso


 

            La actual sede central de la UPCN (Unión Personal Civil de la Nación, antigua residencia del empresario italiano Lorenzo A. Semino,  fue construida en el año 1906, obra del arquitecto italiano Gerónimo Agostini y ha sido restaurado y puesto en valor por esta Institución.

 

Con un estilo que combina el Art Nouveau, el Floreale Liberty italiano y el Secesionismo Vienes, es un Petit Hotel / Palacete; capolavoro arquitectónico y decorativo, en una construcción de tres plantas con una extraordinaria ornamentación interior. Se destacan la gran cantidad de frescos en paredes y cielorrasos, presentando el salón de entrada pinturas en ellos con alegorías y retratos de grandes personajes italianos: Dante Alighieri, Cristóbal Colon, Giuseppe Verdi y Galileo Galilei.

 

            El comitente fue un comerciante y empresario italiano que hizo fortuna en Argentina a principios de siglo XX, quien contrata a un exitoso arquitecto italiano, Gerónimo Agostini, para la construcción de su vivienda particular y es por esta razón que deseamos también rendir homenaje a todos los inmigrantes italianos por su legado patrimonial a Buenos Aires, obras que engrandecen nuestra cultura y son importantes atractivos turísticos.


Vitrales del primer Piso


 

Paralelamente dentro de este marco presentaremos el nuevo circuito arquitectónico del Barrio de Monserrat con arquitectos como Mario Palanti, Gerónimo Agostini, Juan A. Buschiazzo, Francisco Tamburini, Virginio Colombo, Francisco Gianotti y otros, todos italianos, que hicieron grande a nuestro patrimonio edilicio.

 

Nuestro nombramiento simbólico es parte de las actividades de la Ruta Argentina del Art Nouveau, que cuenta con 7 ciudades argentinas participando activamente, Buenos Aires, Rosario, Bahía Blanca, Córdoba, S. M. de Tucumán, La Plata, Mendoza, y donde la obra de los arquitectos italianos es parte fundamental del patrimonio arquitectónico local.

En la oportunidad también se hizo a los 700 años del fallecimiento del autor de la Divina Comedia, ocasión en la que AANBA realizó un acto con la participación de la Embajada de Italia.

 

Adjuntamos  flyer del evento

Poster del evento


Se informa, asimismo, que se ha subido a YouTube un video del evento con el Titulo: Edificio Emblemático 2021 AANBA Art Nouveau sede Central UPCN

 

Información brindada por Willy Pastrana

Presidente AANBA y Ruta Argentina del Art Nouveau

jueves, 14 de octubre de 2021

El Parque que supimos conseguir

 

El parque que supimos conseguir 

(nota del arq. Tito Gastaldi para Revista Habitat)









En el barrio de La Boca se encuentra el primer parque de flora nativa de la ciudad que fuera creado por la ley 1464 en el año 2004, e inaugurado en noviembre de 2006.

La idea del parque comenzó a existir tiempo antes, en el año 2000 y,  gracias a la denodada labor de muchos vecinos de la zona, esa ley lo institucionalizó.

El PARQUE DE FLORA NATIVA BENITO QUINQUELA MARTÍN reúne condiciones excepcionales: Fue la Primera Iniciativa Popular de la Ciudad que alcanzó la Promoción (17.271 adhesiones), y en el 2003 fue votado como prioridad del Presupuesto Participativo; su diseño se realizó empleándose el programa Diseño Participativo del Paisaje por primera vez para un nuevo espacio público; y es el primero en la Ciudad de Flora Nativa. También es el primero del que dispone el barrio de La Boca.

Espacio del Parque utilizado como estacionamiento previo 
a la creación del mismo

Estado del área antes del Parque


En el barrio de La Boca existía un gran predio ferroviario conocido como Casa Amarilla. El lugar abarcaba un amplio sector entre Av. Alte. Brown y Av. Martín García, Irala y Blanes.

El terreno donde hoy puede apreciarse la réplica de la casa del Almirante Guillermo Brown, marino irlandés nacionalizado argentino y creador de la Armada Argentina, estaba en una zona de grandes quintas, de las cuales hacia 1817, la de Britain ocupaba la mayor parte de lo que hoy conocemos como Casa Amarilla. Según cuenta Santiago Calzadilla: “fue en esta quinta que se plantaron por primera vez las peras de agua, llamadas del Buen Cristiano Williams, que maravillaban a los porteños". (N de R: el lugar donde hoy se encuentra la réplica de la casa del Almte Brown no corresponde exactamente al lugar donde se hallaba la original; estaba en el predio pero no sobre la Av. que lleva su nombre)

En  el transcurso del tiempo esa tierra pública se fue enajenando para distintos usos con una  urbanización desordenada, actualmente en algunas áreas falta resolver una adecuada conectividad y algunas calles tienen la nomenclatura desplazada.

De hecho lo único que quedó en manos del Estado Nacional es lo que la Comisión de Vecinos de la calle Irala y Adyacencias, conseguiría, después de innumerables gestiones para crear el primer parque público de flora nativa de la Ciudad. El espacio donde está ubicado el Parque de 3,8 hectáreas se ubica en la calle Irala, entre Pi y Margall y Aristóbulo del Valle y vías del Ferrocarril Roca.

Allí se guardaban algunos contenedores y camiones, una especie de gran baldío cuya principal actividad era la de un estacionamiento para vehículos en los  días  en que se disputaban partidos de fútbol en el vecino estadio del Club Boca Juniors.

Como es sabido, La Boca  sufrió degradación y deterioro a partir del cierre de su puerto en los años 60´; con las sucesivas crisis se transformó en una zona de  grandes depósitos,  generando un grave problema con el tránsito pesado, situación que desbordó cuando hicieron un desvío ilegal y empezaron a pasar por la calle Irala una enorme cantidad de vehículos pesados, estimado en 1400 camiones por día.

En el año 1999  la Comisión de Vecinos de la Calle Irala y adyacencias concurrió al entonces CGP 3 - en ese momento sito en Av. Martín García - y se sumó a la Comisión de Ambiente. Allí les entregaron copia de los lineamientos estratégicos del proyecto del plan urbano ambiental de la Ciudad que preveía que las playas ferroviarias que fueran desafectadas de transferencia de carga iban a ser destinadas preferentemente para espacios verdes de uso público.

Junta de firmas para la creación del Parque


Esa información fue vital para decidir acciones futuras y  mirar de otra manera ese gran terreno baldío

En Septiembre de 2000, en una tímida carilla acompañada de 220 firmas la Comisión pidió la  “reconversión de la Terminal Multimodal Casa Amarilla en ESPACIOS VERDES. La misma se basó en la imperiosa necesidad que tiene nuestra Ciudad de contar con superficies permeables, áreas forestadas, espacios públicos y mayor conectividad urbana; apelando para ello al PLAN URBANO AMBIENTAL -Ley 71 de 1998- y al Art.30 de la Constitución de la Ciudad.”

En abril de 2001 la Dirección General de Planeamiento e Interpretación Urbanística notificó que la propuesta era convergente con lo explicitado para el sector en el Plan Urbano Ambiental, lo que hizo crecer sus esperanzas. Sin embargo, en Septiembre del mismo año apareció en el diario Clarín una nota titulada: “Tierras abandonadas del ferrocarril se usarán para proyectos urbanísticos". Ese proyecto pretendía dividir el predio en cinco partes: Cuatro manzanas de complejos de edificios y una pequeña plaza en el medio. Esa noticia los motivó a defender con más ahínco su propuesta.

Las aperturas mostraban las calles atravesando las vías, algo que después supieron estaba prohibido.

Por ello se recurrieron a la Defensoría de la Ciudad, Adjuntía del Prof. Brailovsky, especialista en temas ambientales, tomando conocimiento de que existía la Iniciativa Popular, una herramienta de participación ciudadana de la Constitución de la Ciudad, herramienta que desconocían. Así, decidieron presentar un proyecto de ley propio, con un destino diferente al que el Ejecutivo impulsaba con pedido de preferencia.

Para entonces ya habían entablado contacto con la Asamblea Permanente por los Espacios Verdes Urbanos (APEVU) y varias organizaciones vecinales del barrio de La Boca. Con el intercambio de ideas su proyecto original creció. El Parque debía ser de ESPECIES AUTÓCTONAS para recuperar el paisaje original y darle un plus de interés al paseo. Eran momentos de gran intensidad social y Diciembre de 2001 los encontró con la gran ventaja de ser un grupo pre-existente con un proyecto propio para divulgar y mucha ciudadanía ávida de participar.

Sabían que para un colectivo tan pequeño resultaría muy difícil juntar el 1,5 del padrón electoral de la Ciudad, casi 40.000 firmas; sin embargo al mes y medio ya tenían las primeras 4000 firmas que obligan por ley tanto a la Legislatura como al Gobierno a difundir la Iniciativa. Como nunca se había hecho,  las dilaciones eran constantes, hasta que mediante una carta documento se logró  destrabar y avanzar con la difusión.



Mientras consideraban estos obstáculos, averiguaron que la Iniciativa Popular no se contraponía con que algún legislador presentara el proyecto y la Diputada Beatríz Baltroc lo representó.

En tanto, la Iniciativa Popular que había sido lanzada el 1°de Agosto  de 2002 cumplió el plazo de un año con un apoyo muy significativo: pudieron reunir 14.271 firmas, además de 3.000 adhesiones; un logro importantísimo para un reducido grupo de vecinos. Las firmas fueron corroboradas por etapas por la entonces Dirección de Participación Ciudadana de la Legislatura, certificación que sirvió para anexarlas al expediente del Proyecto de Ley.

Para concretar el proyecto era necesario, además de la sanción de la ley, que el ONABE cediera los terrenos. Tuvieron una primera reunión con el Prof. Fernando Suárez, Presidente del ONABE,  quien les adelantó que se firmaría el convenio con el Gobierno de la Ciudad para su traspaso, lo que sucedió el 31 de Julio de 2003, para ser destinado a uso público y comunitario, en concordancia a la propuesta vecinal.

Aquí pasó algo muy importante: al tener su proyecto estado parlamentario, dialogaron con todos los bloques políticos y llegaron a tener 31 firmas de legisladores, el número necesario de votos para la primera lectura,  pero en ese momento debido al cambio de pertenecía política, dos de ellos, que ya habían firmado, retiraron su apoyo en el recinto en la última sesión de 2003.

Durante enero de 2004 se reformuló el proyecto incorporando las condiciones del convenio suscripto entre el ONABE y el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Esto delimitó la superficie para el parque y  la reservada para la operatoria del ferrocarril.

DISEÑO PARTICIPATIVO

            La importancia de consensuar ideas y proyectos entre los vecinos del barrio y los entes gubernamentales queda de manifiesto en la concreción de este proyecto.

2° encuentro de Diseño Participativo

En paralelo, se tomó conocimiento de la existencia del Programa de Diagnóstico Participativo del Paisaje e iniciaron las gestiones para poder darle continuidad a la participación. El Programa se había aplicado para remodelación de plazas existentes, pero nunca para un espacio público desde cero. Además, daba resolución a otras cuestiones  que preocupaban a la Comisión ya que si se llamaba a concurso podía demandar mucho tiempo, y en un predio tan codiciado significaba poner todo en riesgo. También podría resultar en un diseño de avanzada, pero alejado de los intereses de los vecinos, que venían luchando por este tema desde hacía largo tiempo. La crisis socio-económica del 2000 golpeó muy fuerte en el barrio, ya de por sí con muchas necesidades, y, por tanto,se deseaba un proyecto a medida  y no uno que demandase esfuerzos y costos elevados.

SIN ROSAS….

            En los albores del siglo XXI el camino a transitar no se mostró como un lecho de rosas sino un camino con varias piedras aún por remover.

En  julio de 2003 se firmó el convenio de sesión  aunque ello no implicó que se pudiesen iniciar las obras de inmediato ya que en octubre se ocupó el predio con más de 1000 contenedores y  el Club Boca Juniors continuaba utilizando el espacio para estacionamiento durante los partidos. Por ello, en 2004 se debió presentar un amparo judicial.

FLORECIENDO:

En Abril de 2004 se votó en primera lectura y en septiembre en segunda lectura la ley para zonificar como  Urbanización Parque el predio de Casa Amarilla, que se convirtió así en el Primer Parque Público de La Boca y el primero de la Ciudad de Flora Nativa y con diseño participativo.

Cuando se ingresó por primera vez al lugar se tomó real dimensión de la amplitud del predio lo cual se constituyó en una emoción muy fuerte. Fue la verdadera experiencia del espacio.

El PARQUE DE FLORA NATIVA BENITO QUINQUELA MARTÍN pronto cumplirá 15 años. Su importancia crece día a día reafirmando que se está en el camino correcto: un urbanismo respetuoso del ambiente, que incluya la participación ciudadana y el respeto por los espacios públicos. Los invitamos a vivir esta experiencia, para que conozcan y disfruten de este Parque en el que se llevan a cabo diversas actividades periódicamente.

El Parque comienza a tomar forma

El Parque previo a su inauguración

El material para esta nota tanto bibliográfico como gráfico fue provisto por la Sra. Silvana Canziani, Presidenta de la Comisión de Vecinos de la calle Irala y adyacencias a quien agradecemos su inestimable colaboración.



Vista aérea del Parque

El Parque en la actualidad



Actividades en el Parque

Para más información: www.vecinosdeirala.freeservers.com

Comisión de Vecinos de la Calle Irala y Adyacenciasvecinosdeirala@yahoo.com.ar

F: vecinosdeirala.adyacencias

www.vecinosdeirala.freeservers.com

W: +54 911 5623 722

SEMANA ART DECO conjuntamente con VIVI FRANCIA

 Me complace invitarlos a participar  de la tercer Edición consecutiva de SEMANA  ART DECO BS AS,  que se suma  a la SEMANA  FRANCESA  para  para celebrar desde el 25 de octubre al 01 de noviembre VIVÍ FRANCIA.

Sumate, te esperamos !!!!













lunes, 11 de octubre de 2021

Un sobre con fotos archivadas del Riachuelo





Horacio González reflexiona sobre el Riachuelo de Buenos Aires a partir de documentos fotográficos conservados en el Archivo General de la Nación.

En octubre del 2018 se realiza en el Museo de la Ciudad de Buenos Aires una exposicion "Levando anclas" sobre el primer puerto de la ciudad de Buenos Aires, el Riachuelo, con fotos del Ministerio de Obras Publicas, subsecretaria de vias navegables.


por Horacio González - Sociólogo, docente y ensayista

Un sobre con fotos archivadas del Riachuelo. ¿Pero qué Riachuelo, en qué momento, con qué siluetas de barcos a vela con poderosas chimeneas envueltas en neblina? 
Porque la neblina también se fotografía, o mejor dicho es lo único que se fotografía, lo demás son los perfiles de embarcaciones que con mayor o menor nitidez brotan de esas brumas. Algunas imágenes son vistas aéreas, otras se disponen a documentar administrativamente un movimiento de barcos, la construcción de los puentes, el panorama de las fábricas y embarcaderos. 
Otras se detienen en los pormenores de un poderoso remolcador. 
El Riachuelo como enjambre de vidas laborales, cordajes y una línea ferroviaria que lo bordea, una colmena portuaria que no cesa en sus humaredas y actos de carga y descarga, así ya no existe. 
Las fotos siempre congelan el tiempo y son hermanas de la nostalgia. Pero también se relacionan con una incógnita legítima. ¿A que tiempo, a qué año, a qué momento pertenecen? 
Damos vuelta las fotos y en su reverso el archivista ha dispuesto unos signos a veces ilegibles, a veces escuetos, en muy pocas ocasiones datando las imágenes con precisión. Algunas pertenecen al archivo del diario Noticias Gráficas. 
Pero las informaciones archivistas, ricas en claves y clasificaciones, son ahorrativas en pormenores, salvo algunas que tienen pegado en su revés un comentario periodístico. 
Dicen que algunos boteros se resisten a la construcción de los puentes. ¿Progreso o tradición? 
Pero al curioso visitante de esas maravillosas fotografías no se le escapa que aquí no solo hay una historia del Puerto de Buenos Aires -en este sobre, casi enteramente predominan las escenas de los años 30-, sino también una historia de la mirada, de nuestra propia mirada. Miramos esos viajeros de las lanchas que cruzan del Dock Sud hacia la Ciudad; están vestidos como si fueran oficinistas, sombreros adecuados, trajes con la disciplina que está ausente en el remero, personaje fundamental. 
Algunos quisieran que las fotos dijeran todo y que el empleado del archivo conociera todos sus anclajes, no en un río, sino en un tiempo específico. 
Sin embargo, como estas fotos también son una historia de la archivística nacional -quién la ha archivado, qué manos anónimas escribieran las escuetas frases que leemos en su dorso-, el placer de observarlas se acrecienta cuando descubrimos ante esas imágenes, que en verdad somos nosotros, los que cotejados con esos fotógrafos desconocidos, dadivosos con sus señales artísticas impensadas que el tiempo revaloriza, los que debemos dedicarnos a aguzar la imaginación. 
No vamos a un archivo a buscar respuestas sino a ofrecerles las preguntas desconocidas que el archivo nos implora.

Barcos en la niebla del Riachuelo. Buenos Aires, 1952. Archivo General de la Nación, fondo Acervo Gráfico, Audiovisual y Sonoro. Código: AR-AGN-AGAS01-Ddf-rg-1462- 6818

Obreros saliendo del trabajo cruzan el Riachuelo en barcazas. Archivo General de la Nación, fondo Acervo Gráfico, Audiovisual y Sonoro. Código: AR-AGN-AGAS01-Ddf-rg-1462- 153271



Vista aérea del Riachuelo y el Puente Pueyrredón. Archivo General de la Nación, fondo Acervo Gráfico, Audiovisual y Sonoro. Código: AR-AGN-AGAS01-Ddf-rg-1462-75384

Riachuelo: vista del transbordador Presidente Sáenz Peña. Archivo General de la Nación, fondo Acervo Gráfico, Audiovisual y Sonoro. Código: AR-AGN-AGAS01-Ddf-rg-1462- 75396

Para Inspiraciones: pensamientos desde archivos. Bicentenario del Archivo General de la Nación.

Memoria visual de Buenos Aires


Riachuelo Año de realización: 2006 Se reconstruye la transformación de La Boca , Barracas, Pompeya, el bajo Flores y otros barrios ribereños del Riachuelo, desde los tiempos en que el pequeño río era un ecosistema vivo en un paisaje silvestre. Remontando las contaminadas aguas del presente se visualiza en cada barrio y en cada puente la transformación del paisaje, el impacto de la revolución industrial y la posterior devastación del área en los años de la desindustrialización, así como la resistencia del tejido muticultural de nuevos y viejos pobladores

La serie de proyectos de Investigación UBACyT cuyo denominador común es la “Memoria Visual de Buenos Aires” dirigido por los arquitectos Graciela Raponi y Alberto Boselli viene desarrollándose desde hace casi tres décadas en sucesivos y conexos proyectos bianuales y trianuales, en el IAA-FADU-UBA (1), con el apoyo de investigadores de ese Instituto, del Centro de Arqueología Urbana y otras instituciones (2), Hay una continuidad de más de veinticinco años de proyectos con resultados verificados que postulan un programa permanente de investigaciones sobre la ciudad uniendo fuerzas con los otros grupos del IAA que abordan el campo de la Historia Urbana